Su viaje, pues, un manjar. Mi tribu urbana favorita, por mucho.
lunes, 27 de diciembre de 2010
La Tribu
Su viaje, pues, un manjar. Mi tribu urbana favorita, por mucho.
sábado, 25 de diciembre de 2010
lunes, 13 de diciembre de 2010
Karla Jazmín y Alejandro
TOLUCA.- El remordimiento por serle infiel a su esposa combinado con el consumo de mezcal y cocaína llevaron a Alejandro Sánchez Varela a dar un martillazo a Karla Jazmín Rueda Servín, poner las manos sobre su cuello y ahorcarla después de tener relaciones sexuales con ella.
Y la desesperación por deshacerse del cadáver, llevaron al hombre a quemar con gasolina y descuartizar con una segueta a la estudiante de la UAEM para después tirar sus restos en los límites de los municipios de Tenango y Malinalco.
“Estaba con ella (Karla Jazmin) y me acordé de mi bebé, me acordé de mi esposa y me sentí muy mal, me empecé a alocar, tomé el martillo y le pegué en la cabeza”, dijo el inculpado, cuya confesión fue grabada por las autoridades ministeriales y presentada por la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM).
“Y sigo viva que es lo importante”, escribió paradójicamente Karla Jazmin en su cuenta de Twitter la noche del 16 de Noviembre, horas antes de ser asesinada.
Alfredo Castillo Cervantes, procurador del Edomex dijo que lo acontecido no es asunto de violencia de género.
“No es el tema de que ella sea mujer ,sino el remordimiento que él siente en ese momento por estar ahí cuando él tenía una esposa y tenía un hijo, si esto es una cuestión de género o no, aquí más bien estamos viendo la relación entre dos personas que se conocían”.
Sánchez Varela, de 26 años de edad y quien además de taxista era freelance del Sistema de Radio y Televisión Mexiquense, podría enfrentar una condena de más de 50 años de cárcel al tener todos los agravantes en su contra, agregó el funcionario.
He aquí la reproducción parcial de la nota que hice para Grupo Reforma sobre el caso que este lunes es el tema en boga, el que acapara portadas y es motivo de diversas opiniones de columnistas para mañana quedar empolvado.
Para evitar despistes, la cronología es la siguiente:
18 de Noviembre
A las 23:50 horas, Alejandro recoge a Karla Jazmín en las instalaciones del Sistema de Radio y Televisión Mexiquense, donde de acuerdo a la PGJEM es vista con vida por última vez.
19 de Noviembre
Al filo de las 9:00 horas, vecinos de Karla Jazmín aseguran verla salir de su casa rumbo a la escuela. Según las pruebas periciales y la confesión del inculpado, la joven muere horas antes, de madrugada.
20 de Noviembre
La familia de Karla Jazmín la reporta como desaparecida.
22 de Noviembre
Alejandro empeña pertenencias de Karla Jazmín para obtener dinero
23 de Noviembre
El inculpado adquiere una segueta y guantes con los que descuartiza el cuerpo.
25 de Noviembre
Alejandro adquiere bolsas y costales, donde deposita las partes del cuerpo de Karla Jazmín y los abandona en el paraje entre Tenango y Malinalco.
27 de Noviembre
Personal del Instituto de Servicios Periciales encuentra restos humanos en un paraje ubicado en el límite de los municipios.
6 de Diciembre
Las pruebas periciales determinan que los restos pertenecen a Karla Jazmín
9 de Diciembre
Con una orden de cateo, autoridades ministeriales detienen a Alejandro en un domicilio ubicado en la Unidad Habitacional Suteym, Almoloya de Juárez.
12 de Diciembre
Alejandro es presentado por la PGJEM como presunto responsable del delito de homicidio. El procurador explica que podría alcanzar más de 50 años de cárcel.
Vaya caso. Ahora que, con todo y lo explícito de la presentación de la autoridad y más allá de que no quede mayor cabo suelto, me quedan tantas reflexiones, tantas preguntas que pudieran o no ser periodísticas.
1.- ¿Qué sintió Alejandro, el joven sin historial criminal, un instante después que se le pasara el efecto del alcohol y la coca, luego de dar el primer martillazo no en la cabeza de Karla Jazmín, sino en su propio ataúd?
2.- ¿Qué hace uno custodiando un cadáver durante una semana?, ¿se puede dormir?
3.- Con todo y la mata alborotada, la barba crecida o la ropa humilde, no me pareció ver más que a un tipo, diría decente, cagado de miedo mientras era fotografiado y videograbado por un batallón de reporteros.
4.- Entre el pull de prensa hubo quienes lo reconocieron, especialmente los del Sistema de Radio y Televisión Mexiquense, ¿quién habría pensado entre sus ex compañeros que sería capaz de semejante crimen?
5.- ¿Ya le habrá caído el veinte de lo que le espera en la cárcel, no por el encierro, sino por la bienvenida que le tendrán preparada?
6.- ¿Qué sintieron sus padres al verlo en todos los noticieros y periódicos del Estado?, ¿qué le dirán al bebé de seis meses cuando pregunte por su papá?, ¿qué dice su esposa?, ¿tienen ellos algún elemento que aportar?
7.- La familia de Karla Jazmín ¿quedó conforme con los resultados?, ¿en verdad hubo justicia para la estudiante?
8.- Aunque se da por hecho que Alejandro es indudablemente el villano de esta historia ¿existirá algún elemento a su favor?, ¿o a poco toda su vida fue nada más un antecedente al 18 de noviembre?, ¿su presentación en la procuraduría es o no un montaje?
9.- ¿Que si me gustaría entrevistar a este personaje? ¡por supuesto!
jueves, 2 de diciembre de 2010
Una Carroña
miércoles, 1 de diciembre de 2010
El Misterioso Caso Del Señor Daditos
¿Dónde quedó Daditos?
Para tragedia la de la mascotita de mi sobrina, la niña Ventanitas. Un caso policiaco.
Ventanitas ha sido la mejor de su grupo de las últimos días en el segundo año del Instituto México y como recompensa fue la encargada de custodiar por tres días a Daditos, el hamster que su maestra regaló al grupo como parte de estas dinámicas de estimulación temprana. En mis tiempos nos daban un coscorrón y un sello de No Trabaja.
Bien pues, Ventanitas ha confesado que todos en su salón quieren mucho a Daditos, le dan de comer semillas y le platican sus tareas, que el niño mejor portado se lo puede quedar, que hasta quieren comprarle un amiguito. Mejor recompensa no tuvo mi sobrinita que cargar con él hasta su casa.
Pero el chingado animalito desapareció.
No me quiero imaginar los lagrimones que Ventanitas en cuanto se enterara que la mascota de su clase escapó de su jaula mientras ella se fue a la escuela. Peor, inconcebible pensar que al menos 30 escuincles la fueran a señalar como la culpable de la irreparable pérdida de Daditos.
Luego de peinar todo un primer piso buscando entre muebles y cajas, cuatro adultos no dimos con el mentado ratoncito de menos de diez centímetros, nada más para evitar el numerito del berrinche sieteañero.
Hubiéramos puesto al ex procurador Alberto Bazbaz Sacal a indagar la desaparición, pues de todas maneras, todo el tiempo que estuvo desaparecido, Daditos no salió de su habitación.
El cadáver de Daditos fue localizado bajo la rueda de su jaula, camuflado por su alfombra de aserrín. Igualito que la niña Paulette oiga.
Diez tiendas de mascotas después encontramos a un ejemplar lo bastante parecido: un roedor color miel con manchitas blancas al que a punta de tehuacanazos obligamos a responder al nombre de Daditos. Chale, yo propuse que ahora lo llamemos Ze Pequenho.
Lo único que ahora rezamos es que a nadie se le ocurra revisar el carnet de nacimiento del chingado hamster.
Descanse en paz en el cielo de las mascotas.